¡Oh, comer sin engordar! Desde destacadas figuras del mundo de la farándula como Jack Black o las modelos súper delgadas de Victoria Secret; todos en algún momento nos hemos mirado la pancita y nos hemos preguntado si algún día existirá una forma de comer todo lo que nos gusta sin engordar.
Todas tenemos esa amiga “biónica” que no suda y que come más que cualquiera en la habitación sin subir un gramo de peso, luego estamos nosotras que tan sólo tomar una bocanada de aire pareciera que ya hemos ganado cinco kilos demás.
Lo peor de todo es que si le preguntamos ¿cómo hacen? La respuesta que obtenemos casi siempre es la misma: No sé, nací así. Y la mayoría de las veces es cierto, éstas personas poseen un metabolismo acelerado pero muchas veces desconocen este factor.
De la misma forma las personas que parecen “asimilar hasta el aire que respiran” también desconocen que adquiriendo una serie de hábitos alimenticios podríamos ser como estas personas; todo se trata de mejorar la capacidad que tiene nuestro cuerpo de metabolizar los alimentos que ingerimos.
Muchos actores de Hollywood utilizan métodos para adelgazar e incluso para engordar cuando deben interpretar un papel que les exige una apariencia física específica para así tener una mayor credibilidad en sus actuaciones, aunque algunos son realmente exigentes, aquí te decimos 11 de ellos fáciles de hacer y que te permitirán por fin comer todo lo que desees sin que subas de peso.
1. Come para alimentarte y no por otra razón
El primer error usar la comida como medio de escape ante la presión social, o incluso para los problemas de autoestima; si te encanta la comida debes entender que nuestro cuerpo sólo la usa para reponer las energías que consumimos, es cierto que algunos alimentos por sus propiedades nos pueden hacer sentir un poco más animados, pero comer para contrarrestar la depresión sólo te hará caer en un círculo vicioso infinito pues subirás de peso lo cual te desanimara y para subirte el ánimo volverás a comer repitiendo una vez más el ciclo.
2. Si te gusta comer, ¡come más veces! Pero come menos
Este es el primer paso para comenzar a comer lo que quieras sin aumentar ni un kilogramo. Se trata de acelerar nuestro metabolismo y esto se logra estableciendo horarios en los cuales se deben ingerir los alimentos. El día dispone de 24 horas, un excelente truco es disponer de por lo menos 8 horas para que nuestro cuerpo procese los alimentos, lo que llamamos digestión, por lo que en las 16 horas restantes podrás comer siempre de una forma consiente; puedes comenzar a las 07:00 y de allí en adelante ingerir alimentos cada tres horas, pero manteniendo una regla muy importante, las cargas de comida deben comenzar siendo fuertes y poco a poco ir disminuyendo su volumen, claro que siempre se puede hacer una excepción.
3. Comemos primero por los ojos y la nariz, de último por la boca
Nos sucede mucho que vemos a alguien comiendo una rica hamburguesa o percibimos el olor de las papas fritas y entonces mágicamente tenemos hambre, pero hambre de eso específicamente; lo malo de esto es que si decidimos no comer el daño que nos causamos será incluso peor a la larga que si nos damos el gusto, por ello lo mejor es comer pero engañando a nuestros sentidos, y no me refiero a imaginar que comemos la hamburguesa mientras lo que realmente le estamos dando a nuestro cuerpo es tofu; lo ideal es comer la versión sana de nuestro antojo. En el caso de las hamburguesas podemos suplantar las salsas dañinas por condimentos que agregaran no sólo un sabor igual de bueno sino también más textura al paladar, existe pan de hamburguesa bajo en calorías, lo puedes reconocer porque está bañado con granola en lugar de semillas; por último, come una hamburguesa pequeña evitando los agregados fritos, que sea de pollo a la plancha o la parrilla.
4. No tienes hambre, realmente tienes sed
Muchas veces a media tarde por el cansancio que nos provoca el calor combinado con una larga jornada de trabajo sentimos la necesidad de reponer las energías, pensamos que una buena comida sería la solución perfecta, pero nada más lejos de la realidad. Si comienzas el régimen de comer cada tres horas desde las 07:00 no sentirás tanto este desgaste; pero cuando te suceda lo mejor que puedes hacer es tomar una bebida rica en antioxidantes los cuales te ayudarán con los problemas de energía, ya sean libres de gluten o no, las opciones son muy buenas, no solo por su variedad sino porque le ayudarán mucho a tu flora intestinal.
5. Sé constante, respeta tu cronograma
Uno de los aspectos más importantes para lograr el objetivo de acelerar tu metabolismo es no comer a deshoras, recuerda que a diferencia de otras personas estás entrenando a tu cuerpo para que éste sea más funcional, es un camino cuesta arriba en todo momento y cualquier desliz te hará retroceder diez pasos por cada uno que avances.
6. No renuncies a las grasas
Manteniendo el hilo de idea antes mencionado, recuerda que estás entrenando a tu cuerpo para metabolizar de forma más efectiva los alimentos, por ello renunciar a lo que se considera “malo” por su alto contenido de grasas saturadas sería contraproducente; poder comer sin engordar no se trata de leer la etiqueta de las cosas y contar las calorías sino de que nuestro cuerpo pueda hacer una digestión eficaz. Dejar de consumir estos alimentos es cortarnos las garras para defendernos de ellos, no los consumas en exceso nunca más, pero no dejes de someter a tu organismo al estrés de procesarlos.
7. ¡Postre! La única comida que no va al estómago sino al corazón
Esta es una de las mayores ventajas que las personas comprometidas con poder comer sin engordar tienen, y es que el postre tiene que formar parte de tu dieta ¿quién va a decirle no al postre? El helado de mantecado ayuda a evitar el reflujo gástrico causado por la acidez y las nueces, así como las almendras son frutos secos en extremo saludables para el organismo, así que busca combinar ambos en una rica porción de las que ya te has acostumbrado a consumir y cómelo sin culpa.
8. Nada de carnes rojas después de las 19:00 horas
A diferencia de la mayoría de los alimentos, nuestro organismo digiere las carnes rojas más lentamente, ¡incluso hasta un día entero!, es imperativo que evites ingerir este tipo de carnes en las últimas dos porciones de comida que te falten por consumir ese día, si es posible no comas carne roja en las últimas tres, en su lugar intenta líquidos o alimentos ricos en fibra.
9. ¿Qué pasa si la vida social demanda que rompas tu nuevo estilo de vida?
No le niegues el placer a tus amistades ni a ti misma de compartir un rato diferente, una salida de copas o una cena en grupo en la que siempre hay comida es algo que más que evitar deberías disfrutar sin remordimientos; para ello lo mejor que puedes hacer es mirar bien el menú y tratar de elegir algo acorde con la hora del día en la que estés, si estás en una pizzería pide que la masa sea la mitad de gruesa que la tabla, que la aderecen con vegetales y con la menor cantidad de queso; el horno donde se cocina la pizza se encargará de darle un sabor único a los ingredientes y tanto colorido la hará lucir incluso más deliciosa que cualquiera otra repleta de embutidos.
10. Es cierto, la comida más importante del día es el desayuno
La primera comida es la que viene luego de un ciclo de reposo de al menos 8 horas, además con ella adquirimos las energías necesarias para plantarle cara a todas las responsabilidades que vienen con un ajetreado día de rutina, por ello es la mejor hora para comer una buena cantidad de alimentos altos en proteínas, acompañados de bebidas energizantes que nos ayuden a la digestión. Nunca te saltes el desayuno
11. ¿Se te es muy difícil acostumbrarte y aun con seis comidas diarias sientes ansiedad?
Es normal sentir ansiedad, sobre todo si eres una persona que está saliendo de un régimen alimentario irregular o si estás acostumbrada a usar la comida como mecanismo para lidiar con el estrés. La solución no es dejar de comer sino todo lo contrario, en lugar de seis comidas en un día que sean ocho, una adicional a media tarde y otra entrando en la noche; pero no un plato cargado de alimentos, la opción más saludable e inteligente es comer barras de cereal, prepararlas es realmente económico, podrás agregarles chocolate incluso; lo mejor de todo es que preparando la comida adquirirás un nivel de conciencia intrínseca sobre el esfuerzo que estás haciendo para lograr la meta de comer lo que te gusta sin engordar y no querrás por nada del mundo renunciar a todo lo logrado.